La vicepresidenta primera y ministra de Economía y Transformación Digital, Nadia Calviño, pronosticó este sábado que España será «uno de los motores de crecimiento» en Europa en 2022.
Calviño, que a través de un vídeo ha querido participar en el encuentro económico de S’Agaró, ha destacado que ha pasado «la peor fase de la pandemia» y que «la recuperación económica está en marcha». Atribuye esta ganancia inesperada a las medidas adoptadas desde marzo de 2020 para dar una «respuesta eficaz» a la crisis sanitaria, «que han permitido proteger el tejido productivo, el empleo y la renta familiar».
Con estas acciones, asegura que se han evitado «una caída del PIB de más del 25%, la destrucción de más de 3 millones de puestos de trabajo y una crisis financiera mundial de impacto impredecible», así como un «gran daño» para la sociedad. El ministro dijo que el mercado laboral es «sin duda el mejor termómetro de la recuperación» y confirma «que el crecimiento está llegando donde realmente importa: las familias y las oportunidades de futuro para las generaciones más jóvenes».
Nadia Calviño detalló que es más «los 20 millones de empleados y trabajadores cubiertos por la ERTE se han reducido a unas 130.000 personas», lo que considera como prueba de que en apenas quince meses, los niveles de empleo antes de la pandemia. Según él, la situación contrasta con la anterior salida de la crisis, donde se tardó doce años en recuperar la tasa de ocupación.
Este panorama sitúa a España, según Calviño, en una buena posición para llevar a cabo el plan de recuperación del gobierno con el apoyo de 140.000 millones de euros en transferencias y créditos de fondos europeos. En este sentido, recordó que España es el país más avanzado de la UE en la implementación del plan de recuperación, el primero en acordar las condiciones de ejecución y en solicitar el primer tramo semestral de 10.000 millones de euros, que será sumado a los 9.000 millones de prefinanciaciones ya recibidas en agosto.
De todos estos fondos, ha precisado que «ya están canalizados para realizar inversiones transformadoras» y que se han transferido más de 10.600 millones de euros a las comunidades autónomas, 1.560 para Cataluña. “Cada semana desplegamos el plan de recuperación paso a paso, objetivo por objetivo, a través de las licitaciones y los proyectos que también lanzamos desde los distintos ministerios”, precisó, para concretar en la convocatoria. De varios proyectos “para la recuperación. y transformación de la economía, conocida como pérdidas pérdidas «.
El primero está vinculado al sector de la automoción, «por lo que España es uno de los países líderes en el despliegue y desarrollo de vehículos eléctricos y conectados».
Recientemente, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció una segunda «salud de vanguardia», dijo Calviño, quien se refirió a otra en la que actualmente se trabaja en relación con el idioma mientras otros están en marcha. Desarrollo «en el sector aeroespacial». agroalimentario, energías renovables y almacenamiento ”.
Reforma laboral
Calviño también mencionó el apoyo a las pymes y autónomos, el kit digital para que las empresas avancen «desde un punto de vista tecnológico» o facturas como el apoyo a empresas innovadoras en fuerte crecimiento. El ministro también recordó que «antes de fin de año», se deben concluir «las negociaciones para una buena reforma laboral». Para llevar a cabo todo el plan, admitió que se necesita «el máximo apoyo social» y la colaboración público-privada, pero se mostró confiado para hacerlo realidad si todos están remando «en la misma» dirección «.
Quien visitó S’Agaró es el secretario de Estado de Economía, Gonzalo García, quien ha defendido que España debe tener un marco estable, predecible y de seguridad jurídica para afrontar la recuperación y permitir la creación de más puestos de trabajo y de más calidad. Una reforma laboral que incluye medidas de «flexibilización negociada», porque «a la hora de buscar acuerdos, la mejor suerte siempre», declaró, como sucedió con la ERTE en la pandemia.
Recordó que España ha tenido que sufrir en los últimos años dos grandes crisis, «de las que sólo deberían darse cada cien años», y sin embargo ha resistido bien y ha conseguido mejorar, hasta el punto de que «ahora estamos claramente en una situación más sólida. situación «.
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