El Comité Olímpico Español (COE) dio este lunes el primer paso para desandar la senda del desencuentro que habían comenzado a recorrer los gobiernos de Aragón y Cataluña la semana pasada tras el intento fallido de juntas sus presidentes en la localidad ilerdense de Balaguer, el pasado Viernes. Acabó con la suspensión «in extremis» del aragonés Javier Lambán, advirtiendo a su homólogo, Pere Aragonés, que no tolerará más «faltas de respeto» y el otro respondiendo que las diferencias se solucionan con el diálogo.
Pues bien, el presidente del COE, Alejandro Blanco, que entonces guardó silencio, tendió este lunes a la comprensión cuando visitó al líder catalán en la Generalitat, aprovechando su estancia en Barcelona para la entrega de premios del diario Mundo Deportivo. Una visita inesperada para no hacer saltar por los aires la candidatura antes de partir hacia Pekín.
La expedición española parte esta semana hacia la cita china, que da comienzo el próximo día 4 y Blanco no quería dejar la situación como se quedó a finales de la semana pasada entre Aragón y Cataluña y mantuvo un fugaz encuentro con Aragonés para hablar de la candidatureura para los Juegos de Invierno de 2030. Posteriormente, el presidente del COE también se entrevistó con el consejo de la presidenta, Laura Vilagrà, con lo que le sucedió sobre el misterioso y controvertido encuentro de la semana pasada, que no estaba en la agenda oficial . Como entonces, desde la Generalitat indicaron que «la reunión fue técnica».
Por eso, el presidente del COE, que precisamente estaba en Barcelona para asistir a la gala de Mundo Deportivo, habló durante media hora con el presidente catalán. Sin embargo, desde el gobierno se calificó de «positiva» la reunión entre los presidentes. Y es que, según fuentes de Presidencia, durante la entrevista, Aragonès habló con Blanco sobre la apuesta catalana por los ‘Juegos Sostenibles’ y con el ‘apoyo consensuado de la ciudadanía’.
Un encuentro efímero en Barcelona que sirve para mantener vivo el trabajo de los técnicos, que no puede detenerse pese a las diferencias entre las instituciones, y para dejar aparcado el de los políticos tras la cita de Pekín 2022 a la que se dirige ahora el WCC con la navegación española.
Eso es precisamente lo que Blanco también trasladó este lunes al presidente aragonés, Javier Lambán, quien, según fuentes oficiales de la DGA, le mantuvo informado en todo momento de su encuentro con su homólogo catalán. Al mismo tiempo “que se iba a dar ese encuentro y, después, cómo se dio”.
“Lambán y Blanco han acordado seguir trabajando a nivel técnico en la candidatura de los Juegos Olímpicos y volver a dialogar tras los Juegos de Pekín que se celebrarán en los próximos días”, añaden fuentes del ejecutivo aragonés. Una tregua institucional que es el respiro que el propio Lambán pidió tras el fallido encuentro de Balaguer y que mantiene la llama (olímpica) de momento.
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