Clara Arpa: “Nuestro ejército está hecho para la paz, no para la guerra” :: KPMG

– La logística de campo es aquella que facilita el desplazamiento de las tropas al teatro de operaciones proporcionándoles todo lo necesario para su supervivencia: alimentación, alojamiento, limpieza, servicios médicos, etc.

– Hubo una emergencia y ayudamos con las mascarillas. Aquí hemos preparado una línea de producción y hemos confeccionado casi 50.000 mascarillas gratuitas en marzo y abril de 2020, cosidas con la tela de las sábanas del Hospital Miguel Servet de Zaragoza. Así tratamos de mitigar una emergencia brutal.

– El ejército, la sanidad aragonesa y Unicef nos llamaron para ver si podíamos traer mascarillas de Asia. Decidimos solicitar una subvención del Ministerio de Industria, que nos la concedieron, y empezamos a fabricarlos en Arpa.

“Trabajamos con Defensa, Sanidad e Interior, y con organismos como la ONU, Acnur o Cruz Roja”

– Bueno no. Resulta que después de concedernos medio millón de euros para crear la línea y poder fabricar cerca de 3.000 mascarillas FFP2 al día, la Administración no nos compra porque sigue trayendo las mascarillas de Asia.

– Como tal. Ni el gobierno central ni el gobierno regional nos los compra. Tenemos la línea y está parada. Podríamos producir máscaras, sí, pero nuestros gobiernos las compran en Asia.

– Dicen que somos caros. Van al precio, y el precio es un gasto, no una inversión. Las materias primas tienen un precio y no importa dónde las compres. Donde realmente hay diferencias es en la mano de obra y en la forma de hacer las cosas.

– Yo voy. Las directivas de la Unión Europea deben ser respetadas y no estamos en igualdad de competencia con terceros países. Nos dicen: «es porque en China las mascarillas se facturan a…» Claro. Y además están subvencionados por el gobierno chino.

“La ONU nos llama cuando vive momentos de emergencia”

– Exactamente. Efectivamente, a finales del año pasado, un funcionario del Ministerio de Industria acudió a certificar que las máquinas habían sido adquiridas. De nada servirán los planes de recuperación si no acometemos una profunda regeneración de la administración pública. El gobierno legisla, pero luego no se aplica lo que legisla.

– Todo. Movimos todo. Nuestro producto es 56% aragonés, más del 80% español y más del 90% europeo. De vez en cuando, un cliente nos dice: “No quiero nada hecho en China”. Bueno, podemos fabricar sin material de China. Y la administración debe predicar con el ejemplo.

Arpa, frente a uno de los contenedores que fabrican para la ONU
Fotografía: Ángel de Castro

– Siempre hemos tenido vocación exportadora y siempre hemos trabajado con los Ministerios de Defensa, Sanidad e Interior. Multinacionales y organismos como Naciones Unidas, Acnur o Cruz Roja también son potenciales clientes de Arpa.

– El mercado militar, más del 70%-80%. Después de todo, son los ejércitos los que se dedican a hacer frente a emergencias y desastres el 99% del tiempo. Nuestro ejército está hecho para la paz, no para la guerra.

– En España no tenemos un ejército al uso. No está diseñado para la guerra, pero la gente no lo sabe. “No a la guerra”, “no a la guerra”, dicen. Por supuesto “no a la guerra”, pero hay que tener medidas disuasorias. Dile eso a Putin: «no a la guerra».

– Claro. Necesitas una unidad de estrategia de Defensa que no existe. Una de nuestras principales amenazas es el terrorismo. Otro, la ciberseguridad. Los europeos deberíamos tener un ejército común capaz de hacer frente a estas amenazas. No se trata solo de tanques y aviones.

– Los europeos nos damos cuenta de que los conflictos se acercan a nuestras fronteras y que tenemos vulnerabilidades de defensa. Estamos acostumbrados a que la OTAN sea responsable. No hay dirección. Cada país piensa lo que piensa, y en Defensa nos falta un criterio común. Alemania tenía 40.000 soldados estadounidenses desplegados en su territorio, pero ya no los tiene… ¿y cómo ha podido “jugar” hasta ahora? Compre gasolina a los rusos y, al mismo tiempo, llegue a un acuerdo con los estadounidenses. Era un equilibrio, pero Alemania es tan mala como España en lo que respecta al presupuesto de defensa.

– No tenemos equipos que puedan interactuar entre sí. Te doy un ejemplo: Estados Unidos tiene cuatro armas diferentes; Europa tiene cien armas diferentes. Otro ejemplo: Estados Unidos tiene cuatro helicópteros diferentes; nosotros los europeos, 27 helicópteros diferentes.

– Todo indica que en 2035 habrá un mecanismo de cooperación para tener consorcios industriales europeos y que no se podrá pujar por Defensa si no se va de la mano de otros dos países de la UE. ¿Para que? Precisamente para conseguir una mayor interoperabilidad de los equipos.

– Sobre todo, insisto en el compromiso y la dedicación. ¿Quién patrulla actualmente un lugar tan inhóspito como el Sahel para luchar contra la trata de personas, el terrorismo y el narcotráfico? El ejercito. Y es un contexto a dos horas de avión. A veces nos olvidamos. El ejército es una fuerza de reserva en cualquier conflicto o emergencia.

– A la fecha, mantenemos más de 4.000 unidades operativas en ejércitos y otras organizaciones en más de 45 países. Actualmente, tenemos una fuerte presencia en Asia, en países como Filipinas o Singapur, con hospitales de campaña. Seguimos también con Naciones Unidas en misiones de mantenimiento de la paz. Aquí los convertimos en contenedores que utiliza la ONU en telecomunicaciones y habitabilidad. También estamos presentes en Oriente Medio -en países como Emiratos Árabes Unidos o Arabia Saudí- y también estamos involucrados en algunos proyectos en Latinoamérica y Europa.

– Es un gran proyecto. Diseñamos y fabricamos módulos con un arquitecto experto para una casa pasiva, donde vivirán ocho investigadores. Hemos dotado las instalaciones de energía renovable, eólica y fotovoltaica, y cuando esta energía no se utilice, se convertirá en hidrógeno mediante un electrolizador.

– También tenemos, por ejemplo, hospitales de campaña covid en Guatemala. Finalizamos el mayor proyecto de sanidad militar del mundo: siete hospitales sobre camión para los servicios médicos de Arabia Saudí. Hemos hecho un contenedor de 40 pies donde se cultivan 1500 kilos de achicoria orgánica por semana en una finca a 68 kilómetros de Ginebra. Y en Sri Lanka ahora estamos vendiendo plantas de tratamiento de agua. Hace años tuvimos un proyecto «estrella» con el US Marine Corps, al que suministramos sistemas de energía para todas sus bases.

– Sí, ya trabajábamos con misiones de mantenimiento de la paz en diferentes ejércitos pero, de hecho, en 2013 nos convertimos en proveedor directo de la ONU.

– Siempre nos llaman cuando tienen una emergencia. Mi teléfono personal puede sonar perfectamente un sábado por la tarde. Vienen a vernos cuando tienen una crisis y deciden ir en misión de paz a lugares como Malí, Somalia o República Centroafricana.

– Muchos. En 1950 éramos 2.600 millones de habitantes en el mundo. En 70 años hemos triplicado la población y somos unos 8 mil millones. Este desarrollo lo alcanzamos gracias a la revolución industrial, y nos llevó a una forma de vida inimaginable hace 200 años, pero con importantes daños colaterales. Debemos administrarnos de otra manera porque de lo contrario no tendremos recursos para legar a las generaciones futuras. La sociedad del bienestar está fracasando. Todos nos hemos vuelto muy cómodos y no queremos sacrificar nada.

– Difundir y encontrar soluciones de base a los problemas de base que quedan sin resolver. Nos gusta empujar a los jóvenes que tienen ideas sobre gestión del agua, gestión y eliminación de residuos, habitabilidad, etc.

“Queremos potenciar el hidrógeno verde, generarlo, distribuirlo y dispensarlo”

– En 2017 hicimos un programa de reducción de emisiones de CO2 y esto se hizo, en primer lugar, reduciendo el consumo. Conseguimos reducir la factura de la luz en un 38%. Pusimos 100 kilovatios de paneles fotovoltaicos en el techo y creamos nuestro propio módulo de hidrógeno verde para consumir.

– Creo que si. Para los que tenemos sol, aire y costa en España, sí.

– ¿Y porqué no? ¿No es mucho más caro perforar un pozo, extraer petróleo, llevarlo a una refinería, refinarlo y distribuirlo?

– Queremos impulsar el hidrógeno verde, promocionarlo y popularizarlo. Queremos generarlo, almacenarlo, distribuirlo y distribuirlo.

– ¿Sabes las multas que pagamos a Europa porque no tenemos depuradoras en la mayoría de ciudades de España? Hemos diseñado nuevos sistemas de potabilización de agua para pequeños municipios. Hemos logrado desarrollar pequeñas plantas de tratamiento de aguas residuales que depuran un 80% más y cuestan casi un 20% menos. Tenemos un campamento de 4000 personas en todo el mundo y necesitamos limpiar las aguas. Bueno, toda esta tecnología que trajimos a lugares remotos, ahora la llevamos al territorio, a pueblos pequeños.

EN CLAVE PERSONAL

corrió tres maratones

Clara Harpe no para. Su agenda está ocupada. Durante la entrevista, el teléfono suena varias veces. Además de Consejera Delegada de Arpa, es Presidenta del Pacto Mundial de Naciones Unidas en España, Presidenta del Centro de Innovación para el Desarrollo Sostenible, miembro del Comité Ejecutivo de CEOE y Vicepresidenta de la Federación de Empresarios del Metal de Zaragoza, entre otras responsabilidades.

Casada y madre de tres hijos, Clara reconoce haber tenido mucha suerte en la vida porque tiene un marido, con el que sigue «felizmente casada después de 37 años», que entendió sus constantes inquietudes y sus muchos viajes, y le puso las cosas fáciles.

Es muy atlética en su tiempo libre. A El le gusta correr; Ha corrido tres maratones. También es un apasionado del esquí y la bicicleta de montaña. Admite que la pandemia le ha roto el ritmo -«Estuve un poco flojo durante tres años»-, pero espera volver pronto al nivel que tenía en 2019.

Le encanta el deporte y estar con su familia.

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