Dos Guardias Civiles adscritos al puesto de Granadilla de Abona salvaron la vida de un anciano en un incendio registrado en la madrugada de este sábado 11 de junio en la zona costera de dicho municipio.
La rápida actuación de los agentes evitó un trágico desenlace, ya que en el piso donde vive el anciano se produjo el incendio que él mismo provocó, según las primeras informaciones ofrecidas por fuentes del distrito.
Además, estos profesionales del Instituto Armado ayudaron a otros ciudadanos del edificio en el que ocurrió el hecho a salir de sus casas para garantizar su seguridad.
Los hechos comenzaron poco antes de las 3:30 horas en la localidad de El Médano. Los agentes se activaron para acudir a un edificio de la calle Marcial García, en el que se había producido un incendio.
El quirófano del 1-1-2 también activó a agentes de la Policía Local de Granadilla, así como a bomberos del consorcio tinerfeño del Parque de Las Chafiras y personal sanitario de dos ambulancias del Servicio de Emergencias de Canarias.
Estos recursos llegaron de forma escalonada al edificio en el que se produjo el incendio. Según testigos del hecho, los Guardias Civiles subieron a la Casa 1B, donde se iniciaron las llamas y en la que, según testimonio de los habitantes, se encontró a un anciano.
Una vez en la puerta, los oficiales se identificaron como oficiales y comenzaron a gritarle al hombre que les abriera la puerta de inmediato. Sin embargo, al no obtener respuesta, dijeron los vecinos, los guardias civiles empezaron a llamar a la puerta hasta que consiguieron forzar la cerradura y entrar en el piso.
El vecino estaba acostado en una habitación que solo estaba iluminada por velas. De inmediato, profesionales del Instituto Armado lo sacaron del edificio y lo llevaron a la calle, donde lo esperaba personal de salud, incluido un médico. Inicialmente, los afectados sufrieron intoxicaciones por inhalación de humo.
En cuanto al anciano, primero fue trasladado al servicio de urgencias del Hospital del Sur, en la zona de El Mojón. Sin embargo, posteriormente se consideró procedente su traslado a la unidad de psiquiatría del Hospital Universitario Nuestra Señora de la Candelaria (Hunsc).
Los bomberos del Consorcio de Tenerife entraron en la citada vivienda y apagaron las llamas. Al mismo tiempo, los agentes del cuerpo de seguridad evacuaron, de forma preventiva, al resto de vecinos del edificio que aún se encontraban en su interior. Uno de ellos también requirió atención médica por inhalación de humo.
Algunos ciudadanos explicaron tras el hecho que el anciano padecía problemas de salud mental. Efectivamente, las llamas se habrían iniciado en el patio interior de la casa del anciano, donde acumuló diversas bolsas de basura.
Y algunas personas han señalado que al mirar hacia el patio interior donde se inició el fuego, observaron que el anciano supuestamente tiró papeles en llamas a la basura.
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