La nueva «ley trans» aprobada en España agilizará los trámites y evitará la interminable espera de una decisión judicial. Pero antes de que entrara en vigor hoy, un juez de Ourense autorizó la rectificación del sexo de un niño de 8 años en el registro civil. Primero lo escuchó y luego decidió otorgarle al pequeño su nueva identidad porque, según el juez, a Alejandro “le sobra madurez”. Su familia lo pidió al principio, pero otro juez se lo negó sin ni siquiera escuchar al pequeño. Sus familiares apelaron. Su madre asegura que «desde niño siempre decía que era un niño, hablaba en primera persona masculina». Tras apelar la negativa del primer juez, el otro les concedió el cambio. Este requisito es precisamente lo que elimina la nueva ley trans, porque la persona trans no tiene que aportar un informe psiquiátrico que patologice la transexualidad. María José, la madre de Alejandro, no puede evitar sonreír ante un gran avance y espera que el caso de su hijo abra el camino.
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