El vecino de Artesa de Segre (Lleida, Lleida), de 39 años, de nacionalidad portuguesa, que intentó quemar viva el pasado lunes a su pareja sentimental, de nacionalidad española, de 48 años, ha sido ingresado preventivamente en prisión este miércoles por auto del juzgado de instrucción número 1 de Balaguer. Según la orden de prisión, hay indicios de que el recluso, de iniciales HAMM, roció a la víctima con líquido inflamable, luego le prendió fuego a ella y al resto de la casa, luego cerró la puerta con llave antes de marcharse, según El Periódico de Catalunya. ha argumentado, desde el grupo Prensa Ibérica. El tribunal lo está investigando por un delito grave de intento de asesinato y otro delito grave de incendio provocado.
Los hechos ocurrieron en la madrugada de este lunes, a las cuatro de la mañana, en un edificio de tres pisos. El incendio presuntamente provocado por el sospechoso obligó al resto de inquilinos a salir a la calle. Una de ellas pudo escapar por las escaleras tapándose con una chaqueta, y otra mujer tuvo que descender por una tubería. Agresor y víctima abandonados por sus propios medios en la calle. Fueron los primeros en salir de la finca. En realidad, la mujer no recuerda con claridad cómo llegó allí, aunque explicó que quizás fue el propio imputado, el mismo que había intentado matarla, quien finalmente la ayudó.
La víctima, que prestó declaración en los Mossos d’Esquadra de la unidad de quemados del hospital Vall d’Hebrón, denunció que el domingo su pareja llegó a casa a las 23.00 horas, buscó dinero en su bolso para comprar droga. y partió de nuevo. Entonces la mujer se fue a la cama. A eso de las cuatro de la mañana se despertó sobresaltada porque el hombre volvió y le roció líquido en la cara, diciéndole: “no se va a encender, hijo de puta, te voy a matar”. El agresor, sin embargo, regresó de inmediato con otro líquido, posiblemente acetona, lo roció nuevamente y luego le prendió fuego. Según su declaración, también le gritó: “ahora te vas a morir, ahora te voy a quemar todo”. El sospechoso trató de estrangularlo mientras gritaba. La mujer también dijo que pudo salir cuando, luego de este ataque, el mismo hombre la agarró del brazo y le dijo: “Vamos, yo también me quemo”.
Según declaraciones que la policía tomó al resto de vecinos, algunos afirmaron haber escuchado gritos alrededor de las 23:00 horas, pero que las peleas entre ambos eran frecuentes. Una vecina incluso confesó que cuando a las cuatro de la mañana escuchó a la mujer gritar “por favor no me maten”, tampoco se alarmó porque las discusiones entre ambos solían expresarse en estos términos. Los vecinos también explicaron que, justo antes de darse cuenta de que había un incendio en el edificio, vieron a la pareja en la calle y ella gritó que lo había quemado.
contradicciones
El hombre, por su parte, dijo que cuando entró a la casa, la mujer ya tenía fuego en el cuerpo y que, según la orden, cayó en varias contradicciones, como afirmar que las ventanas del piso estaban abiertas cuando no lo estaban. t. Y que se fue del lugar y se fue a dormir a casa de un amigo, donde fue arrestado tres horas después porque no quería que nadie pensara que era él.
Bombarderos de la Generalitat enviaron seis dotaciones para controlar el incendio, que se inició en la Plaza Mayor. Nada más apagar las llamas comprobaron que alguien había colocado una nevera junto a la puerta de entrada del apartamento para taparla y que las puertas y ventanas estaban cerradas.
El tribunal lo envió a la cárcel. La investigación continuará ahora por la reconstitución del incendio que arrasaron los especialistas de la policía científica de los Mossos. La mujer presenta quemaduras en el 18% de la superficie del cuerpo, en particular a nivel de la cara y los brazos. Su estado sigue siendo grave y pidió protección a la policía para evitar que su pareja la volviera a atacar.
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