“La cría de visón americano, destinado a peletería y artículos de moda, además de amenazar el bienestar animal, es una auténtica ‘bomba biológica’ que amenaza la naturaleza y nuestra salud”. La asociación conservacionista WWF impulsa una campaña para exigir la prohibición de las granjas de visión por considerar que suponen «una explotación animal que no debería existir en nuestro siglo y que no podemos tolerar».
WWF espera que España siga el camino de países como Holanda, que ya han decidido cerrar todas sus granjas de visones. Mientras tanto, en España todavía hay 32 granjas, «con muchos de estos animales criados en pequeñas jaulas para ser sacrificados por sus pieles a los seis meses».
Según la ONG, estas condiciones de hacinamiento y convivencia en jaulas “aumentan el riesgo potencial para la salud y son totalmente opuestas a las condiciones de vida en libertad del visón americano, una especie solitaria y territorial por naturaleza, acostumbrada a nadar y bucear en los ríos. o humedales». «.
“Por eso, hay muchas razones para pedir el cierre de las granjas de visones americanos en nuestro país”, explica WWF, que también subraya el peligro que suponen estas granjas: “Las continuas fugas de estos animales suponen una amenaza muy grave. para nuestra fauna autóctona.
El grupo ecologista señala que el visón americano es una especie exótica invasora y «un carnívoro voraz que se alimenta de aves que anidan en el suelo y de muchas especies protegidas de anfibios, peces e incluso mamíferos, como la amenaza del desmán pirenaico».
Además, ha puesto al borde de la extinción al visón europeo, una especie autóctona, al que está desplazando y que ya es el carnívoro más amenazado de Europa, del que quedan menos de 500 ejemplares en España.
Posibles transmisores de virus a los humanos
El visón europeo ya ha desaparecido del 90% de su rango original, víctima del avance del visón americano de las granjas peleteras. “Cada año se invierten en España ingentes cantidades de dinero público para intentar controlar las poblaciones de visones de estas instalaciones”, explica WWF.
Las granjas de pieles de visón estadounidenses ya han sido prohibidas y cerradas permanentemente en varios países europeos, como el Reino Unido, Croacia, Austria, Suiza y los Países Bajos, y en otros fuera de Europa, como Japón.
En España, por el contrario, se ha autorizado este comercio porque las administraciones central y autonómica, que han mantenido “una legislación laxa y adaptada a estos comercios, por lo que muchas empresas peleteras extranjeras se han instalado en nuestro país y se espera que sigan desarrollar», denuncia la ONG.
“Debido a las malas condiciones en las que viven en las jaulas, el visón americano puede ser huésped de virus como el covid-19 o la gripe aviar A y transmitirlos a los humanos, siendo un posible origen de pandemias aún mayores a las sufridas hasta la fecha”. Alerta WWF.
“Ni nuestra naturaleza ni nuestra salud pueden esperar más, mantener las granjas de visones estadounidenses es mantener una cruel explotación animal que pone en grave peligro a la naturaleza y a nuestra salud”, añade.
Por todo ello, WWF exigió al Gobierno español “el cierre urgente y definitivo de todas las granjas de visón americano existentes en España, con todas las garantías necesarias en materia de salud y bienestar animal”.
También pide “la modificación urgente de la normativa vigente para que esta actividad quede definitivamente prohibida en todo el territorio español y que cese la explotación de las explotaciones existentes”.
Peligroso para la biodiversidad
El visón americano (Neovison vison) es un carnívoro de tamaño pequeño y mediano originario de América del Norte, de la familia de los mustélidos, al igual que el visón europeo, la nutria, la marta y la comadreja. Es un animal semiacuático que vive ligado a ríos y humedales, capaz de adaptarse a otros hábitats acuáticos como lagos y zonas costeras.
Tiene un carácter altamente invasivo porque es un depredador oportunista que se alimenta de muchas especies, tiene una alta tasa de reproducción y una gran capacidad de dispersión (los juveniles son capaces de dispersarse a decenas de kilómetros de su territorio de origen), por lo que puede expandirse rápidamente y colonizar grandes territorios.
Por ello, aunque su área de distribución nativa se extiende por Alaska, Canadá y la mayor parte de Estados Unidos, fuera de su área de distribución nativa está presente en tres continentes y en Europa se encuentra en 25 países.
Por todo ello, es considerada por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) como una de las especies exóticas invasoras más peligrosas para la biodiversidad.
Las primeras poblaciones de visón americano en España se formaron en la década de los 80 y desde entonces se observa una continua expansión de su área de distribución, ocupando en la última década más de una cuarta parte del territorio español y hoy en día su expansión va en aumento.
A pesar de que en 2013 el visón americano fue incluido en el catálogo español de especies exóticas invasoras, la laxitud en la aplicación de nuestra normativa medioambiental no ha conseguido frenar nuevos proyectos de instalación de criaderos o ampliación de los existentes, especialmente en regiones como Galicia, produciendo incluso un efecto de atracción para los productores de otros países europeos donde se empiezan a prohibir las granjas.
.