Carlos Alcaraz aseguró que había «llovido más que sufrido», pero que a veces «los nervios entran en juego», tras ganar la final del Masters 1.000 de Madrid al alemán Jan-Lennard Struff por 6-4, 3-6 y 6-3.
«Hoy vine por momentos, en otros sufrí, pero eso es lo que hay que vivir. En estas circunstancias a veces te pueden llegar los nervios, entran los nervios en juego. Pero disfruté más de lo que sufrí», dijo. dijo tras una final mucho más equilibrada de lo esperado entre el número dos del mundo y el 65.
“Hay que estar ahí todo el tiempo, Jan es muy agresivo, sabía que venían bombas. Soy agresivo, pero también sé adaptarme a lo que viene”, dijo durante sus primeras declaraciones en la pista. , antes de recoger su trofeo, el segundo consecutivo en Madrid.
«A veces me digo, Charly, haz un poco de magia, y luego se me sale», añadió el jugador murciano sobre las veces que llegó tarde al marcador.
Alcaraz se tiró al suelo en la pista Manolo Santana tras su victoria, abrumado por la emoción, y luego se dirigió al palco de su equipo para abrazar a sus entrenadores y familiares.
También felicitó a su madre, por el Día de la Madre, en el mensaje que escribió en la cámara de la cola.
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