Madrid, 24 may (EFE).- Entre el 15 y el 30 % de los niños y adolescentes españoles padecen dolores crónicos, especialmente de tipo musculoesquelético, pero más del 40 % están infradiagnosticados, lo que tiene un enorme impacto en su vida emocional, social y educativa. vida.
Así lo han anunciado hoy los organizadores del XIX Congreso Nacional de la Sociedad Española del Dolor (SED), que se celebra hasta el viernes en Madrid, donde han recordado ese dolor crónico, aquel que dura más de tres meses de forma continua durante más de cuatro días. a la semana, es la enfermedad más frecuente en España.
Avec une prévalence qui a grimpé en flèche de 20% à 27% ces dernières années, elle touche 9 millions d’adultes et constitue le premier motif de consultation médicale, mais la majorité, jusqu’à 64%, ne reçoit pas de soins en medicina general.
Afecta a todo tipo de población, pero más a las mujeres alrededor de los 50 años; De todas las personas afectadas, el 40% no tiene diagnóstico a pesar de que llevan un promedio de 12 años con este dolor.
Otro problema, señaló Maite Bovaira, presidenta del comité organizador del Congreso, el dolor crónico tiene un gran impacto social y psicológico: el 29% tuvo que ausentarse de la enfermedad con una duración promedio de cinco meses y el 32% tuvo que abandonar su laboral, sin olvidar que el 22% sufre depresión y el 27% ansiedad, según el Barómetro del Dolor Crónico en España.
“Estamos acostumbrados a un dolor que muchas veces pasa desapercibido, a ver que el dolor se aguanta, no pasa nada, se pasa”, pero el dolor crónico, apeló el médico, “debe ser visto como una enfermedad que requiere tratamiento y diagnóstico en sí misma”. y por lo tanto un seguimiento interdisciplinario”.
Carlos Goicoechea, copresidente del comité científico del congreso de la SED, continuó, no es “un dolor que no te deja vivir. Es un dolor que te acompaña 24/7, que profesionaliza todo tu trabajo”. ámbito familiar Se ve modificado. No tienes que estar en el paciente postrado en cama sin poder salir».
A pesar de su impacto, poco más de la mitad de las personas con dolor crónico tienen que esperar entre uno y cinco años para ser derivadas a una unidad del dolor, una derivación que en la mayoría de comunidades no ha sido posible desde la atención primaria, sino desde los hospitales.
Los datos se deterioran aún más cuando hablamos de población pediátrica; Así, entre un 15% y un 30% de los niños y adolescentes, según la patología que padezcan, padecen dolor crónico, según un estudio del Instituto de Investigación del Hospital 12 de Octubre y la Universidad Miguel de Cervantes publicado en la revista infantil.
Existen factores de riesgo, como haber sufrido maltrato, abandono, divorcio o muerte de uno de los padres; el dolor más común afecta el sistema musculoesquelético relacionado con el crecimiento.
A la SED le preocupa especialmente que este colectivo esté aún más infradiagnosticado que el de los adultos. “El problema ya no es solo que sufran dolor, que ya es un problema en sí mismo, sino las repercusiones que tiene en su vida, su entorno, sus relaciones con los demás, su asistencia a la escuela, todo lo que hacen. con la expectativa de desarrollo”, advirtió Goicoechea.
Si ya es difícil encontrar unidades multidisciplinares para adultos, lo es aún más para los niños, y eso, concluyó, “es un problema enorme porque afecta al desarrollo de una persona que no ‘todavía no ha alcanzado la madurez’. EFE
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