La campaña para las elecciones autonómicas y municipales afronta sus dos últimos días tras casi dos semanas en las que las apuestas en el frente han sido inesperadas para casi todos los partidos. Primero fueron las listas de EH Bildu, luego el “asunto Vinicius”. Y en medio, otro anuncio de Pedro Sánchez y varios rifirrafes entre el PSOE y el PP. El debate sobre el racismo en España a raíz de los insultos que recibió el jugador del Real Madrid durante su partido contra el Valencia, el pasado fin de semana en Mestalla, adquirió una nueva deriva debido a las palabras de Isabel Díaz Ayuso sobre el Partido Nacionalista Vasco (PNV).
Fue en una entrevista con EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, del grupo Prensa Ibérica, en la que la presidenta de la Comunidad de Madrid volvió a negar que haya un problema generalizado de racismo, y aseguró que en la política «por supuesto, hay racistas». comportamientos», citando expresamente al partido jeltzale: «Hay algunos en el PNV, es la base del Partido Nacionalista Vasco, allí priman», ha dicho, provocando un fuerte malestar en esta formación que su presidente, Andoni Ortuzar, ha expresó en repetidas ocasiones en televisión: «Soy de los que creen que en política no todo vale. Esta mujer parece valer todo. Esto me parece una injusticia y un desacuerdo”.
Ayuso: «España no es racista pero claro que hay comportamientos racistas, también en política. Lo está haciendo el PNV»
Unas declaraciones que sorprendieron en el seno del PP. Muchos dirigentes no entienden la necesidad de lanzar este ataque, precisamente en este momento en que los populares intentan tender puentes con el partido de Ortuzar pensando en las próximas elecciones generales.
Desde la llegada de Alberto Núñez Feijóo a la presidencia, la idea de cortejar a los nacionalistas vascos y tejer la sintonía que tuvieron en el pasado ha sido una relativa prioridad. De ello es muy consciente porque el objetivo de Feijóo sigue siendo obtener una amplia mayoría en las elecciones que le permita gobernar en solitario, sin Vox, y a lo que habrá que sumar el apoyo de pequeños partidos. El PNV siempre ha sido una pieza clave para el PP y el PSOE.
El PNV responde a Ayuso tras hablar de racismo: “Todo le vale algo a esta mujer. Es injusto «
Y, precisamente, la aguda disputa que ahora mantiene el PNV con EH Bildu por la hegemonía en el País Vasco, dado que Pedro Sánchez ha situado a la izquierda abertzale como socio prioritario (la ley de vivienda era el último ejemplo), había planteado más esperanzas dentro del PP. La creencia es que el malestar que pueda sentir el PNV si Bildu sigue creciendo podría traducirse en un mejor trato con el PP, dado que Feijóo nunca apoyará al partido de Arnaldo Otegi.
En medio de esta estrategia, las palabras de Ayuso fueron un jarro de agua fría. Según explica un alto cargo del PP, además de «cabrear innecesariamente» al PNV, las palabras del madrileño sirvieron de «pegamento» a los dos partidos vascos que se enfrentaron durante toda la campaña de las listas Bildu con miembros de ETA. Ortuzar dijo en respuesta a la entrevista: «No sé quién te dijo que ibas a tener más votos en Madrid jugando con los vascos y con los partidos vascos. Tomó como doble eje de la campaña sonar a Bildu y sonarnos a nosotros”, aseguró, mostrando empatía con los abertzales que hacía tiempo que no veíamos.
Como ha publicado este periódico en distintas ocasiones y Ortuzar lo ha repetido siempre que ha tenido la oportunidad, la verdadera línea roja para que el PNV vuelva a apoyar a un gobierno del PP se llama Vox. Los nacionalistas vascos señalan que esta ecuación es imposible. Y por eso a Feijóo le interesa tanto seguir cerca del PNV: igual le interesa evitar el partido de Santiago Abascal. La cuestión es que ahora se suma un enfrentamiento directo con Ayuso. El líder y coordinador general del PP, Elías Bendodo, evitó pronunciarse este miércoles sobre el asunto.
El presidente de Andalucía, Juanma Moreno, buscó el equilibrio con sus conciudadanos, discutiendo el origen del PNV con Sabino Arana: “No me gusta encasillar a los partidos políticos, pero es cierto que durante un tiempo el PNV tuvo una supremacía actitudinal. En eso estoy de acuerdo con Ayuso”, aseguró.
el papel de Ayuso
El caso es que la última polémica entre el presidente madrileño y el PNV se suma a todas las demás ya la sensación constante de que ha sido la que ha marcado en todo momento la campaña del PP. Las diferentes estrategias del PP Nacional y la Puerta del Sol sobre el debate sobre la ilegalización de Bildu acabaron provocando debate interno y malestar en Génova para desviar la atención de Pedro Sánchez. A día de hoy, y después de que Feijóo dejara claro que no ve ninguna posibilidad en ese sentido, Ayuso sigue diciendo que cree que se debe consultar al Tribunal Supremo.
El líder del PP también ha recuperado uno de sus mantras políticos, la necesidad de dejar gobernar a la lista con más votos después de las autonómicas. Incluso desveló que volvería a hacer esta oferta al PSOE (consciente también de que el PP será la primera fuerza en prácticamente todos los territorios). Ayuso también ha querido dejar muy claro que no solo no comparte este puesto, sino que no ve camino posible para ello.
Ahora le toca el turno al scrum contra el PNV, sabiendo que el PP tiene una relación de guante blanco por lo que pueda pasar. Quedan dos días para el final de la campaña y es probable que no haya un día en el que no se haya preguntado a los principales líderes nacionales por unas declaraciones de Ayuso. Un cansancio que todos muestran a pesar de que evitan entrar en el enfrentamiento. Pero ya está claro que el PP quiere acabar con la campaña. La sensación de optimismo es generalizada, sobre todo después de la plaza de toros de Valencia.
“Las cosas van a ir muy bien”, le repiten a la dirección. Habrá que ver si Ayuso conseguirá esa ansiada mayoría absoluta y si los puestos más disputados con el PSOE, hoy en manos de los socialistas, recaerán en el bando popular. Los resultados también se medirán internamente. Incluso el diario británico ‘The Times’ dedica una columna a Ayuso y su futuro político, sin escatimar en predicciones: «Si Feijóo fracasa en diciembre, esperará entre bastidores para asumir su cargo», escribe en inglés. , ella esperará entre bastidores”, sería la traducción.
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