Como un roble que crece lento pero seguro, así se construye toda relación humana que aspira a perdurar. El ingrediente esencial de esta fortaleza reside en un vínculo de confianza, forjado con el martillo del tiempo y el yunque de la dedicación. Aquí es precisamente donde reside el corazón del asesoramiento financiero personalizado. Su esencia no es otra que un compromiso de servicio que va de la mano con un apoyo constante. Acompañar y fomentar relaciones a largo plazo con los clientes es la esencia de Banco Mediolanum, cuyo modelo de asesoramiento financiero personalizado gira en torno a la figura del Family Banker.
La nueva campaña de comunicación de Banco Mediolanum “Me dio la” es fiel reflejo del éxito de este estrecho vínculo entre cada ahorrador y su asesor financiero, su Family Banker, que está presente en los momentos vitales de las personas a las que acompaña.
Pero, ¿qué es un banquero familiar?
Un Family Banker de Banco Mediolanum es un profesional financiero altamente calificado que se dedica a brindar asesoramiento financiero personalizado y continuo a los clientes del banco. El principal objetivo de un Family Banker es establecer una relación sólida y de confianza con las familias a las que acompaña, abordando todas las facetas de su vida financiera de manera integral. La idea detrás de esta figura es que las necesidades financieras de las personas son diversas y cambiantes a lo largo de su vida, por lo que necesitan un profesional que entienda en profundidad su situación y pueda brindarles soluciones personalizadas. Ya sea para planificar la jubilación, comprar una casa, criar a los hijos o simplemente administrar las finanzas del día a día, un Family Banker se convierte en un aliado constante.
Las ventajas de contar con un banquero familiar de Banco Mediolanum para los clientes son numerosas:
Atención personalizada: Un Family Banker conoce a sus clientes a la perfección, lo que le permite diseñar estrategias financieras a la medida de sus necesidades y objetivos específicos.
Asesoramiento continuo: Los banqueros familiares no solo se preocupan por los problemas financieros actuales de los clientes, sino que también intentan anticiparse y planificar el futuro, adaptándose a los cambios en la vida y las circunstancias económicas.
Confianza: al estar cerca de los clientes y demostrar un compromiso constante con su bienestar financiero, los banqueros familiares construyen una relación de confianza. Esto brinda a los clientes la tranquilidad de saber que tienen un experto financiero en el que pueden confiar.
Acceso a una amplia gama de servicios y productos: Banco Mediolanum Family Bankers puede proporcionar acceso a una diversidad de productos y servicios financieros, que permiten a los clientes gestionar todas sus necesidades financieras.
‘Me dio la’, la nueva campaña de Banco Mediolanum
En concreto, ‘Me dio la’ es un original juego entre el nombre de la entidad (Banco Mediolanum) y esos intangibles que el cliente y su familia reciben de su Family Banker que, además, es siempre el mismo.
Los spots de esta nueva campaña captan el valor de este acompañamiento a través de una emotiva combinación de atributos y escenas cotidianas… Y ahora te ofrecemos un juego:
Número 1 en satisfacción del cliente
El transmisor de estos valores es, sin duda, el Family Banker, el principal canal de relación de Banco Mediolanum con sus clientes y el gran artífice del banco siendo por cuarto año consecutivo la entidad con más clientes satisfechos de la banca española, según el estudio que publica cada año la consultora independiente Stiga.
El estudio destaca que Banco Mediolanum es líder en 14 categorías que están directamente ligadas a algunos de los atributos que destaca la campaña “Me di la”. Una de estas categorías principales es la satisfacción del cliente con su Family Banker.
De hecho, el último estudio de Stiga muestra que el 95% de los clientes se identifican con su Family Banker, que también recibe una puntuación de 9,08 sobre 10, la más alta del sector por su disponibilidad, asesoramiento y frecuencia de contacto. Factores decisivos para fomentar la satisfacción global del cliente y el compromiso con la entidad. Al mismo tiempo, esta forma personal de hacer banca es una oportunidad para todos los profesionales o futuros asesores financieros que deseen desarrollar plenamente esta profesión.
Este trato cercano y constante permite que ambas partes se conozcan. El profesional puede realizar una planificación financiera mucho más adecuada a las necesidades reales de cada ahorrador y apoyarle en la gestión emocional de sus finanzas y ayudarle a tomar las mejores decisiones.
En definitiva, la campaña “Me di la” nace para explicar esta conexión personal a través de la voz de las personas que hablan de su vida y la satisfacción de sentirse acompañadas por un profesional formado y cercano en el camino hacia sus objetivos.
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