Shakira y Piqué se conocieron en 2010, cuando grababan el videoclip de la canción «Waka Waka», el himno con el que la colombiana puntuó el Mundial de Fútbol de Sudáfrica, y competición que acabaría ganando la selección española. , en el que la defensa del FC Barcelona.
En ese momento, la cantante aún mantenía una relación sentimental con Antonio de la Rúa, quien era su representante, e hijo de Fernando de la Rúa, expresidente de Argentina. Este idilio estuvo salpicado de rumores sobre la infidelidad del artista con el futbolista, hasta que, finalmente, la pareja publicó un comunicado en el que informaban de su ruptura, definida como amistosa y en la que, aseguran, no intervino ningún tercero.
Luego de casi 12 años juntos y un año de diferencia, la cantante reveló todo tipo de detalles sobre el fin de esta relación a través de sus canciones. Entre ellos, algunos tan populares como Te felicito, Monotonía o el BZRP Music Sessions 53, que se convirtió en un auténtico fenómeno mundial gracias a las palabras de Shakira a su ex pareja: «Pasé por la negación, la ira, el dolor, la aceptación, el luto, la esperanza, Decepción, esperanza de nuevo e ilusión», dijo en una entrevista con People.
En esta entrevista, Shakira reconoció que la música ha sido fundamental durante todos estos meses para afrontar la que sin duda ha sido una de las peores etapas de su vida: “Tantas emociones y sentimientos que por momentos parecían encontrarse, parecía no poder convivir. al mismo tiempo en mí, que sólo pude desentrañar a través de mis canciones, para entenderme un poco mejor».
Más allá de la ruptura con Gerard Piqué, la colombiana también tuvo que lidiar con los graves problemas de salud que tuvo que enfrentar su padre luego de que se cayera en su casa de Barcelona durante la primera comunión de su hijo Milán: «Se unió a todo, mi casa se estaba cayendo De hecho, Shakira admite haber descubierto la traición de su expareja mientras su padre estaba internado en cuidados intensivos: “Me enteré por la prensa que ella había sido traicionada mientras mi padre estaba en cuidados intensivos. Pensé que no lo haría. Sobrevivir tanto El hombre que más amé en mi vida, mi padre, me dejó cuando más lo necesitaba, pero no pude hablar con él ni recibir los consejos de mi mejor amigo del que tanto hubiera necesitado.
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