La bandera ‘arcoíris’ en la fachada del Ayuntamiento de Valencia, donde el PP gobierna en solitario. Cerca, en la sede de los juzgados presididos por Vox… ninguna referencia al Día del Orgullo.
Misma situación en Baleares. La imagen del Ayuntamiento contrasta con la del parlamento regional, donde el PP llegó a un acuerdo con Abascal. El popular alcalde de Valladolid también necesitó del apoyo de Vox, que con un distintivo en la solapa recibió a representantes del colectivo LGTBI. En Vega de Genil, el nuevo Gobierno del PP y Vox le retiró tras su toma de posesión. Pero hoy lo recoge para celebrar el Día del Orgullo. En Logroño, la bandera entra y sale del balcón. El alcalde popular lo retiró tras una denuncia de la Asociación de Abogados Cristianos y lo colgó tras denuncias del colectivo LGTBI.
Guerra de las banderas en las cortes de Castilla y León, donde Vox asegura que el Supremo lo prohíbe, pero los socialistas lo colocan en las ventanas de sus despachos. El caso más paradójico está en Génave, un pequeño pueblo de Jaén donde el alcalde, de Vox, celebra la diversidad.
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