Mujer. Treinta años y un largo historial de estafas. Trabajó en Internet, circuló en sitios de segunda mano y su producto estrella fue la muñeca Nancy. La venta fue ficticia, fraudulenta: después de la transacción, la muñeca nunca fue enviada. Consiguió estafar a una sola víctima 1.450 euros.
Tenía abiertas más de 50 cuentas bancarias, utilizaba distintas identidades -luego se recibieron denuncias por suplantación de identidad- para contratar las líneas telefónicas con las que contactaban con las víctimas y hacían los acuerdos. La Unidad de Delitos Tecnológicos de la Policía Judicial de la Prefectura Superior de Policía de La Rioja, dentro del denominado operativo CANOPUS, ha permitido su identificación.
Desde Salamanca
Según han confirmado agentes de Europa Press, la autora, una mujer de 30 años de origen español y residente en Salamanca, tiene antecedentes penales por hechos similares a los denunciados. El método era sencillo. Alojaba anuncios en páginas de segunda mano en internet, y cuando un potencial comprador o compradora se interesaba por los artículos que promocionaba, lograba llegar a un acuerdo por el que solicitaba una transferencia por adelantado. Luego desaparecería sin enviar nunca la muñeca. Con este procedimiento consiguió estafar a un ciudadano de Logroño, así como a otras seis personas en todo el territorio nacional.
No te caigas: no rompas el trato
Ante este tipo de estafas, la Policía advierte de que es muy fácil publicar anuncios fraudulentos en sitios de segunda mano y redes sociales simulando la venta de cualquier artículo para que, una vez cobrada la cantidad pactada para su venta, no se proceda al envío del artículo a la venta.
Por tanto, se recomienda a los particulares que realicen una serie de comprobaciones sencillas antes de pagar dichas compras. Así, suelen utilizar trucos de todo tipo que hacen atractiva la venta, como precios más bajos, la necesidad de venderlo por estar desempleado, fotos atractivas en el anuncio, posibles (y falsas) valoraciones de los usuarios. “No hay buenas ofertas en Internet”, advierte la Policía.
Estas personas intentarán engañarte para que creas que la venta está cubierta por legalidades. Para ello, simulan contratos de compraventa que no tienen valor; conversaciones amenas para ganar confianza, capturas de pantalla falsas de la supuesta venta; el envío de documentos de identificación correspondientes a los enviados por otras víctimas.
Al final, alerta a la Policía, una compra entre particulares se basa en la confianza entre las dos partes, cualquier trámite por parte del vendedor no vale nada porque puede ser falso.
Nunca jamás
Se recomienda nunca enviar documentación personal a un particular, bajo ningún pretexto porque la utilizará para enviarla a otras víctimas y es posible que, posteriormente, la persona acabe siendo denunciada o se dé de alta de forma fraudulenta en otros servicios.
Los estafadores usan servicios como WhatsApp para engañar a las víctimas para que se ganen su confianza. Se recomienda gestionar la compra por teléfono y preguntarles las características concretas del artículo a ver que contestan.
Es importante, subraya la Policía, no pagar nada por adelantado. Lo mejor es comprar artículos que se puedan ver en persona y realizar el pago en persona o usar medios que puedan retener el pago hasta que se haya recibido el artículo en venta. “Si, por un momento, sucede algo que te hace sospechar, corta toda conversación, tu experiencia te dice que algo anda mal”, advierte.
Finalmente, “si se realiza una transacción y al poco tiempo te das cuenta de que es fraudulenta, comunícate rápidamente con tu banco para cancelarla y denunciarlo lo antes posible, brindando toda la información posible sobre la venta y el presunto vendedor a una Prefectura de Policía o un Comisario”.
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