La víctima de ‘La Manada’ estuvo ‘en el ojo del huracán’ cuando Josele Sánchez, directora del diario ultraderechista La Tribuna de Cartagena, publicó un artículo en su web titulado ‘No te creo’, en el que Acusó a la joven de haber sido violada durante los Sanfermines de 2016 de ser una «borracha» que «se fue a follar» después de haber «decidido tenerlo» con los cinco sevillanos que la atacaron en un portal de Pamplona. Así se refleja en la sentencia del Juzgado 2 de lo Penal de Cartagena, a la que ha dado su consentimiento CASO ABIERTO, que condena al periodista a tres años de prisión e inhabilitación por un delito contra la integridad moral en competencia con otro por revelación de secretos.
El juez concluye que Josele Sánchez, que también compartió datos personales de la víctima y una foto tomada por integrantes de ‘La Manada’ durante la violación, «acosó duramente» a la niña con «la intención de hacerle daño mal» cuando escribió el 1 de mayo 4 de enero de 2018, “Oye hija, no te creo. No dijiste ‘NO’ en ningún momento. Y, efectivamente, no te violaron (…). tener una experiencia de liberación femenina de la que tanto se habla -y hasta se recomienda- ahora con la ideología de género”; o: «Estabas tan borracho que decidiste salir con cinco matones de mierda. Pero fuiste y jodiste, nadie te obligó, lo hiciste porque tu cuerpo de montaña te lo pidió».
degradante y vejatorio
“Las expresiones son claramente vejatorias, pero sobre todo, tal carácter se evidencia en la publicación del nombre, apellido, domicilio, centro de estudios universitarios, etc. de la víctima, ya que por supuesto son totalmente ajenos al dictamen emitido”, concluye. .. el magistrado en su decisión.
El juez recuerda que la sentencia que condenó a los cinco violadores sevillanos «es la realidad jurídica, por encima de pensamientos, creencias u opiniones»
El periodista publicó unas fotografías en las que se podía ver a la víctima siendo obligada a practicar el llamado «beso negro» a uno de los condenados, José Ángel Prenda, «que resulta especialmente vejatorio y vejatorio», añade la sentencia. . El juez señala que la niña «se había negado a ver esta instantánea durante el juicio en el juzgado de Navarra».
Una joven anónima
Josele Sánchez «difundió este contenido con la intención de atentar contra la intimidad de la víctima y conocer su carácter ilícito», mientras que según el magistrado debió «excederse en la cautela» incluso cuando dio su opinión sobre la sentencia que condenaba a ‘La Troupeau’ : «Estuvimos ante hechos sumamente delicados, una agresión sexual colectiva contra una joven completamente anónima, que de repente se encuentra en el ojo de la tormenta en relación a una sentencia que dio lugar a todo tipo de debates, con repercusión mediática en noticias de televisión, manifestaciones nacionales, etc.
“Todas estas circunstancias exigen que los dictámenes sobre los hechos enjuiciados sean extremadamente cuidadosos, especialmente cuando el procedimiento inicial acaba en sentencia condenatoria en la que se reconoce al perjudicado como víctima de un delito de naturaleza sexual”, añade. El magistrado Álvaro Bellas recuerda al periodista que «finalmente esto y sólo aquello (la sentencia que condena a los cinco violadores sevillanos) es la realidad jurídica, por encima de pensamientos, creencias u opiniones».
términos hirientes
El juez reconoce que «es perfectamente legal discrepar de una sentencia, pero desde luego no está protegido por la ley el uso de términos injuriosos o lacerantes ante la persona que resulta ser víctima de ‘un delito contra la libertad sexual y mucho menos de la publicación de fotografías de contenido claramente sexual y difusión de datos de identificación de las víctimas’.
El condenado pide a los demás que luchen «contra la ideología de género» y para que «no se criminalice a los hombres»
Durante el juicio, el ahora condenado invocó su derecho a la libertad de expresión para justificar su publicación, argumento que el magistrado rechazó: «la vida sexual de una persona debe en todo caso ser protegida de ataques ilegítimos al derecho a la intimidad que debe presidir cualquier acto de carácter sexual y, en este caso, la fotografía podría ser observada por un grupo indeterminado de personas a través de las redes, sin el consentimiento del interesado y con todas las circunstancias particulares del caso”.
Con su publicación, Josele Sánchez «ha dado lugar a la cosificación de la víctima, ya que la ha convertido en un simple instrumento para defender la voluntariedad del acto sexual», indica la sentencia.
Incremento de visitas web
El juez tampoco creyó al periodista cuando aseguró que desconocía que el juzgado de Navarra hubiera prohibido expresamente la difusión de datos que permitieran identificar a la víctima de La Manada: «el propio imputado reveló en su declaración un conocimiento pormenorizado Pero es que también el propio imputado declara que su sitio web experimentó un importante aumento en el número de visitas tras la publicación del artículo y que, además, participó como locutor invitado en un programa del canal regional ETB, con el que el No se puede admitir el desconocimiento de una resolución tan relevante”.
La sentencia también desmiente a Josele Sánchez en el momento en que eliminó el artículo de la web de La Tribuna de Cartagena: «El imputado denuncia que sólo estuvo unas horas al aire, lo que es absolutamente incompatible con la profesión de policía, el puesto quedó en el sitio durante semanas».
Tras su publicación, la víctima «recibió numerosos mensajes anónimos en Internet (insultos, amenazas, montajes fotográficos…), que afectaron a su estado de ánimo y a su situación psíquica, y padecía una angustia generalizada», se lee en la resolución. estados
«Relaciones Consensuales»
Tras conocer la condena que lo condenó, Josele Sánchez subió un video a YouTube en el que reafirma su publicación y nuevamente identifica públicamente a la víctima: «A diferencia del fiscal que me acusó y del juez que condenó, yo vi la cinta donde se toman las relaciones sexuales». lugar entre (nombre de la joven), quien es la presunta víctima, y los integrantes de ‘La Manada’, que me parecen despreciables pero que de ninguna manera fueron violadores. Fue sexo consentido”.
El condenado, que se define como «cristiano y joseantoniano (refiriéndose al líder de La Falange)», asegura que irá a prisión «sin ningún miedo», porque «creo que merece la pena correr el riesgo de ir en contra del funcionario «. verdad que estamos tratando de imponer». Y anima a otros a seguir sus pasos: «Os pido que os implicéis, que luchéis contra la ideología de género, contra la hipersexualización de la sociedad, contra esa educación sexual que ahora será obligatoria para nuestros niños, que a los seis años quieren enseñarles a estimular sus zonas erógenas. Si realmente te preocupas por tus hijos o tus nietos, el hombre no debería ser criminalizado por ser hombre…»
Josele Sánchez termine en annonçant qu’elle désobéira à la décision du juge qui l’a condamnée et lui interdit d’exercer le journalisme pendant les trois prochaines années : «même si j’ai été interdite par la peine, depuis la prison je continuerai a escribir».
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