La actualización semanal de la situación epidemiológica de las variantes del coronavirus en España ha confirmado lo que ya se ha empezado a firmar: Ómicron se está desarrollando rápidamente.
Esta variante representa aproximadamente la mitad de los datos de secuenciación, con datos de la semana del 6 al 12 de diciembre, en nuestro país.
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Durante la semana pasada, se reportaron más de 115,000 infecciones y se espera que el número de positivos para Covid-19 continúe aumentando en los próximos días.
Y es que en los últimos días todos hemos tomado conciencia del aumento de casos que nos rodea.
“Nunca antes había conocido tantos casos cercanos en tan poco tiempo” o “He oído hablar de más casos positivos en los últimos días que el resto del año”, son algunas de las frases que seguimos repitiendo o escuchando.
Los expertos dicen que incluso se podría alcanzar el número de infecciones de oleadas anteriores, aunque con una incidencia mucho menor de hospitalizaciones y muertes debido a las altas tasas de vacunación.
Con este escenario sobre la mesa, la atención primaria se ha derrumbado y prácticamente no hay restricciones sociales en las calles, la precaución y la responsabilidad individual cobran más sentido que nunca.
Una de estas medidas es la cuarentena obligatoria en caso de contacto cercano con una persona infectada por el coronavirus, incluso si está vacunada.
Pero, ¿qué significa exactamente estar en contacto cercano?
Según el Ministerio de Salud y el Instituto de Salud Carlos III, se considera contacto cercano a toda persona que haya estado en el mismo espacio que una persona infectada, a una distancia menor de 2 metros, y por un período de tiempo acumulativo. total de más de 15 minutos en 24 horas.
Asimismo, el contacto cercano también se clasifica como toda persona que «trató» un caso positivo o tuvo contacto con una persona infectada sin las medidas de protección adecuadas, o una persona que manipuló muestras biológicas sin «medidas de protección».
El período de tiempo que se tendrá en cuenta para identificar el contacto cercano será de dos días antes del inicio de los síntomas del caso hasta que el caso sea aislado.
En pacientes asintomáticos confirmados por prueba diagnóstica, se buscarán contactos desde dos días antes de la fecha de recogida para el diagnóstico.
¿Y que no lo es?
¿Cómo proceder?
En todos los casos sospechosos, la recomendación es clara: deben evitarse las interacciones sociales y debe permanecer en su casa el mayor tiempo posible.
La identificación y el seguimiento de todos los contactos cercanos de un positivo puede retrasarse hasta que el caso se confirme con una infección activa mediante una prueba de PCR.
Si se descarta el caso sospechoso, también se suspendería la cuarentena de contactos cercanos.
A la hora de determinar si se debe poner en cuarentena en caso de contacto cercano con un positivo, se deben tener en cuenta diferentes factores, como si están vacunados o no, la comunidad autónoma en la que residen o la variante al origen del contacto positivo.
– En caso de no vacunación, se debe mantener una cuarentena obligatoria de 10 días en todos los casos.
– Si se está vacunado con la pauta completa no se debe hacer cuarentena, excepto si se reside en Cataluña, la única comunidad autónoma que ha aprobado que a partir del 23 de diciembre los contactos estrechos de positivos deben realizar cuarentena, independientemente de si están vacunados o no.
– Además, y en general en toda España, si se confirma que el positivo está afectado por las variantes omicron, beta o gamma, se debe mantener una cuarentena de 10 días, esté o no vacunado.
¿Tomaré una prueba?
El Departamento de Salud recomienda realizar al menos una prueba de diagnóstico de infección activa (PDIA) durante el rastreo de contactos, idealmente hacia el final de la cuarentena.
Sin embargo, si en ciertas situaciones los recursos disponibles no permiten probar a todos los contactos cercanos, esta prueba puede ser preferida para ciertos grupos vulnerables.
La prueba de diagnóstico será preferiblemente PCR, pero dependiendo de la disponibilidad, se puede utilizar una prueba de detección rápida de antígenos.
Este tipo de PDIA se utilizará, en particular, en contextos donde se espera una alta probabilidad de un resultado positivo, como en el caso de contactos en convivencia o durante epidemias.
Y es que debemos tener en cuenta que las pruebas de antígeno deben realizarse siempre que tengamos síntomas y entre los primeros tres y siete días posteriores a la posible infección.
Así, una persona que estuvo en contacto con un positivo ayer tiene muchas posibilidades de ser negativo hoy en una prueba de antígeno y positivo tres días después del contacto, por ejemplo.
En todos los casos, si la prueba es negativa, la cuarentena debe realizarse teniendo en cuenta las variables explicadas anteriormente.
Recomendaciones para contactos cercanos en cuarentena
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