El Ministerio del Interior de Libia anunció el lunes que había encontrado los cuerpos sin vida de cinco inmigrantes subsaharianos en un área cercana a la frontera con Túnez. Las autoridades libias, que dijeron que encontraron los cuerpos durante las patrullas de las fuerzas de seguridad para asegurar las fronteras occidentales, dijeron que se abrió una investigación sobre lo sucedido.
Decenas de migrantes están varados en la frontera entre los dos países, ya que las autoridades tunecinas trasladaron por la fuerza a muchos de ellos desde la ciudad portuaria de Sfax a zonas «remotas» del desierto, donde se registran altas temperaturas y donde no tienen agua ni comida.
Recordemos que muchas ONG han acusado al gobierno tunecino de fomentar una campaña de violencia xenófoba contra los inmigrantes subsaharianos que utilizan el país como trampolín para llegar a Europa. Y es que Túnez se ha convertido en los últimos años en uno de los principales puntos de partida de las embarcaciones con las que los inmigrantes del país y los llegados del África subsahariana intentan cruzar el mar Mediterráneo hacia Europa.
Precisamente, este mes, la Unión Europea y Túnez firmaron un acuerdo por el que el país norteafricano se compromete a cooperar con Bruselas en materia de inmigración a cambio de una ayuda económica estimada en unos 900 millones de euros.
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