El gobierno iraní rechazó las «amenazas» del secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, y exigió a Washington que «reflexione más sobre las consecuencias políticas de este tipo de declaraciones provocativas».
Blinken dijo el domingo que Washington «prefiere» la diplomacia para evitar que Irán adquiera armas nucleares, aunque subrayó que no descarta una acción militar. «Está todo sobre la mesa», dijo.
En respuesta, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, Nasser Kanani, señaló que Irán «ha reafirmado repetidamente la naturaleza pacífica de sus actividades nucleares» y agregó que «las armas nucleares no tienen cabida en la doctrina de seguridad nacional de Irán».
“El gobierno de EE. UU. sabe muy bien que Irán no tolerará ninguna agresión contra su territorio e intereses y responderá con decisión a los agresores que les harán arrepentirse de sus acciones”, dijo, según un comunicado difundido por el Ministerio de Defensa de Relaciones Exteriores de Irán.
Asimismo, calificó de “ridículo” el hecho de que Estados Unidos afirme apoyar al pueblo iraní en el contexto de las manifestaciones que se vienen produciendo desde septiembre por la muerte bajo custodia de Mahsa Amini y llamó a Washington a “poner fin a esta hipocresía y no subestimar la inteligencia política de la nación iraní”.
“Estados Unidos y sus socios europeos no ganarán nada con sus continuas mentiras sobre los asuntos internos de Irán”, dijo Kanani, advirtiendo que “Irán los hará responsables por sus acciones contra Irán”.
Por su parte, la misión permanente de Irán ante Naciones Unidas advirtió que “el uso de una opción militar a cualquier nivel implica que Estados Unidos irá a la guerra”, aunque afirmó que “Irán considera remota esta posibilidad”. .
Fuentes de la misión aseguraron en declaraciones a la revista estadounidense ‘Newsweek’ que ‘si Estados Unidos calcula mal y comienza una guerra’, las consecuencias ‘para la región y el mundo’ recaerían sobre los hombros de Washington. “No hay duda de que Irán tiene la capacidad de defender su seguridad e intereses”, dijo.
Estas declaraciones de las autoridades iraníes se producen tras una serie de explosiones en un almacén de armas de la ciudad de Isfahan (centro), hecho atribuido por Teherán a un ataque con drones. Fuentes estadounidenses citadas por ‘The Wall Street Journal’ dijeron más tarde que Israel estaba detrás del incidente, mientras que EE.UU. se distanció de lo sucedido.
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