La Junta Directiva Regional del Partido Popular se reunió este sábado en Mérida, por primera vez después de las elecciones regionales y municipales, para analizar el escenario político que se presenta. La candidata del PP a la presidencia de la Junta de Extremadura y presidenta del PP de Extremadura, María Guardiola, pidió al líder nacional de Vox, Santiago Abascal, que «deje» sentarse con ella a negociar con el candidato de su partido, Ángel Pelayo, porque «el futuro de Extremadura no se decide en otro lugar sino aquí».
“Ojalá hubiera ya un pacto porque eso es lo que quiere el pueblo extremeño, pero no hay pacto y no estamos negociando porque el señor Pelayo aún no ha recibido el permiso para poder sentarse conmigo”, traslada a su compañeros de partido. En este punto, cabe recordar que Guardiola necesita los cinco diputados que obtuvo Vox en las elecciones para sumarlos a los 28 del PP y poder arrebatarle el Gobierno al socialista Guillermo Fernández Vara.
En este sentido, la líder de Pueblo Popular Extremeño ha destacado que ella es «la única que va a negociar» con Vox, al tiempo que ha lamentado no haberse podido sentar todavía a negociar con Pelayo. “Lo que te digo es que mi palabra es sagrada y no la cambio. Dije que quería gobernar solo y el que piense que mi palabra es estrategia se equivoca”, dijo.
«Tenemos toda la voluntad del mundo para llegar a acuerdos con Vox, para ser presidente y que nuestro Gobierno responda a lo que nos ha pedido la ciudadanía en las urnas, pero para eso tenemos que arremangarnos ya, tenemos poner manos a la obra ahora y lo que no podemos hacer es esperar a que los jefes de algunos (refiriéndose a Pelayo) tomen decisiones en nuestro país en Madrid», dijo. «Mis jefes ya me han dicho lo que me tienen que decir y lo sabemos muy bien, porque nuestros jefes son extremeños», ha subrayado.
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